Qué son los valores de capital a tipo fijo (FRCS)?
Un título de capital a tipo fijo (FRCS) es un título emitido por una empresa que tiene un valor nominal de 25 dólares (aunque algunos se emiten con un valor nominal de 1.000 dólares) y ofrece a los inversores una combinación de las características de los bonos corporativos y las acciones preferentes. Estos valores ofrecen las ventajas de unos rendimientos atractivos:
- Ingresos fijos mensuales, trimestrales o semestrales
- Plazos de inversión generalmente predecibles (20-49 años, aunque algunos son perpetuos)
- Calidad crediticia de grado de inversión (en la mayoría de los casos)
Puntos clave
- Los valores de capital a tipo fijo (FRCS) son valores híbridos emitidos por algunas empresas que combinan características de los bonos corporativos y las acciones preferentes.
- Los FRCS suelen tener un valor nominal más bajo que un bono y ofrecen a los inversores un flujo constante de ingresos por dividendos.
- Aunque la mayoría de las veces se califican como grado de inversión, los FRCS son más arriesgados que los bonos corporativos y se negocian en mercados más ilíquidos.
Los fundamentos de los títulos de capital a tipo fijo
Los títulos de capital a tipo fijo son instrumentos financieros híbridos que pueden estructurarse como deuda o como capital, dependiendo de cómo se presenten en el folleto. Las agencias de calificación han valorado positivamente esta herramienta de financiación para el emisor porque proporciona capital a largo plazo y permite el aplazamiento del pago de intereses a los inversores en caso de que el emisor tenga dificultades financieras.
Sin embargo, al igual que en el caso de las acciones preferentes, estos aplazamientos sólo pueden producirse si la empresa matriz suspende todos los demás pagos de dividendos en acciones. Con los valores de interés diferido, los inversores no tienen garantizados los ingresos al mantener los FRCS, especialmente cuando el emisor se encuentra en dificultades financieras. La opción de aplazamiento de los intereses en los títulos de capital a tipo fijo hace que el riesgo del título sea mayor que el de las acciones preferentes o los bonos corporativos y, por tanto, ofrece un mayor rendimiento a los inversores.
Las emisiones nuevas y secundarias de FRCS cotizan en la Bolsa de Nueva York (NYSE) y también pueden negociarse en el mercado extrabursátil (OTC). En los mercados secundarios, tienden a negociarse de forma similar a los bonos tradicionales, vendiéndose con primas y descuentos respecto a la paridad en función del tipo de cupón declarado del valor en relación con los tipos de interés vigentes, así como de la percepción del mercado sobre la calidad crediticia del emisor.
Riesgos únicos de los FRCS
A diferencia de los dividendos de las acciones ordinarias y preferentes, las distribuciones de los títulos de capital a tipo fijo son totalmente deducibles para el emisor, lo que es similar al tratamiento de los pagos de intereses de los instrumentos de deuda tradicionales. Si un cambio en la legislación fiscal disminuye o elimina la ventaja fiscal de la empresa, ésta podría ejecutar una opción de reembolso de „evento especial” o de reembolso extraordinario, lo que permitiría al emisor reembolsar los títulos al valor de liquidación antes del vencimiento.
La calidad crediticia de los títulos de capital a tipo fijo está calificada por las distintas agencias de calificación, incluida Standard & Poor’s y Moody’s. Las emisiones con menor calificación crediticia pagan un mayor rendimiento a los inversores para compensar el riesgo percibido. Sin embargo, la mayoría de las hipotecas a tipo fijo tienen la calificación de grado de inversión.
No obstante, los FRCS conllevan un mayor grado de riesgo, dado que ocupan un lugar inferior en la estructura de capital de la empresa que la deuda senior. En caso de impago o liquidación, los titulares de la deuda senior serán reembolsados primero antes de que los inversores en FRCS recuperen su inversión. Los titulares de los FRCS tienen un mayor derecho sobre los activos del emisor que los titulares de las preferentes y los bonos.
Los movimientos del mercado pueden afectar a los precios de negociación diarios de estos valores híbridos. Por ejemplo, los precios de los FRCS suelen bajar los días ex-dividendo, que son las fechas en las que los compradores de FRCS no tienen derecho a recibir el dividendo. Aunque los valores se negocian en el mercado abierto, los FRCS se consideran bastante ilíquidos, especialmente cuando aumentan los tipos de interés vigentes en el mercado.