Qué es el nivel de liquidación?
El nivel de liquidación, normalmente expresado en forma de porcentaje, es el punto que, si se alcanza, iniciará el cierre automático de las posiciones existentes. Se trata de una característica de seguridad desarrollada para evitar que los inversores sufran pérdidas significativas más allá de un punto específico y, por lo general, está predeterminada por el operador o la empresa de corretaje.
Puntos clave
- El nivel de liquidación, normalmente expresado como un porcentaje, es el punto que, si se alcanza, iniciará el cierre automático de las posiciones existentes.
- El nivel de liquidación suele estar predeterminado por el operador o la empresa de corretaje.
- Los niveles de liquidación suelen estar asociados a las cuentas de margen.
- El nivel de liquidación es un mecanismo de seguridad desarrollado para proteger tanto a los operadores como a los corredores de pérdidas significativas más allá de un punto determinado.
Comprender el nivel de liquidación
En el mercado de divisas, el nivel de liquidación es el nivel predeterminado, comúnmente conocido como ajuste de márgenes, a partir del cual se inicia un proceso de liquidación automático. Este valor se basa en la cantidad específica de fondos en la cuenta de margen de un operador, por debajo de la cual se activa la liquidación de las posiciones del operador y se ejecuta a las tasas de mercado vigentes.
Normalmente, el nivel de liquidación se expresa como un valor porcentual de los activos de la cuenta de margen del operador. Si las posiciones de un operador de divisas van en su contra, su cuenta acabará alcanzando el nivel de liquidación, a menos que el operador inyecte fondos adicionales. Otro nombre para el nivel de liquidación es margen de liquidación. Estos tipos de ventas forzadas de posiciones para cumplir con los requisitos de margen no requieren la aprobación del cliente.
La mayoría de los operadores de divisas compran con margen, que es el acto de pedir dinero prestado para comprar valores. El comprador sólo paga un porcentaje del valor de los valores adquiridos y toma prestado el resto del banco o corredor. El corredor actúa como prestamista y los activos, normalmente en efectivo, de la cuenta del operador actúan como garantía. En función de la solvencia de la persona y de otros factores, el corredor establecerá los requisitos de margen mínimo, o inicial, y de margen de mantenimiento que deben cumplirse antes de que el operador pueda empezar a comprar con margen. El margen de mantenimiento se refiere a la cantidad mínima de dinero que debe haber en la cuenta antes de que el corredor obligue al inversor a depositar más dinero.
En el caso de las cuentas de efectivo, el agente no tiene la misma capacidad de liquidación, a menos que se deba a un factor externo, como una quiebra personal. Una cuenta de margen, en cambio, permite a los inversores pedir prestado hasta el porcentaje ofrecido por el corredor del precio de compra del valor. Sin embargo, el importe exacto del margen varía en función del valor. Un requisito típico de una cuenta de margen es que el cliente mantenga al menos el 25% de su propio dinero del valor total de mercado de la(s) posición(es) en un momento dado.
Nivel de liquidación como herramienta de protección
El nivel de liquidación es un mecanismo de seguridad desarrollado para proteger tanto a los operadores como a los corredores de incurrir en pérdidas significativas más allá de un punto determinado. Cuando la financiación de la cuenta de un operador de divisas alcanza el nivel de liquidación, todas las posiciones que tenga el operador se cerrarán automáticamente al mejor valor disponible. Los niveles que pueden desencadenar esta acción varían según el corredor o el agente con el que el inversor tenga su cuenta.
El comercio de divisas hace un gran uso del apalancamiento. La inversión inicial, conocida como margen, es necesaria para acceder al mercado de divisas. Cuando los precios cambian, las peticiones de margen obligan al inversor a liquidar algunas o todas las posiciones abiertas o a añadir más fondos a su cuenta para cubrir los requisitos de margen. En épocas de extrema volatilidad del mercado, las grandes oscilaciones del precio podrían dar lugar a una rápida sucesión de peticiones de márgenes, lo que presenta la posibilidad de pérdidas significativas.
Cuando un corredor gestiona la actividad comercial en nombre de un operador, éste asume el riesgo de estas posibles pérdidas. Por lo tanto, el corredor de divisas que mantiene una cuenta para un operador asume la responsabilidad de que las posiciones del operador pierdan dinero. Otro riesgo para el corredor es que el operador no pueda devolver los fondos prestados utilizados para iniciar las operaciones de divisas.
Por lo tanto, un nivel de liquidación determinado, que el operador acepta al abrir su cuenta, fijará el requisito de margen mínimo. Este requisito de margen, expresado en porcentaje, es lo que el operador de divisas tolerará antes de liquidar automáticamente los activos del operador para evitar la posibilidad de impago. Esta acción sirve como medida de protección, que da al distribuidor cierta seguridad de que ha mitigado su exposición a las pérdidas.