¿Qué son los honorarios de retención??
Los honorarios de retención son una cantidad de dinero que se paga por adelantado para asegurar los servicios de un consultor, autónomo, abogado u otro profesional. Los honorarios de retención se pagan más comúnmente a terceros individuales que han sido contratados por el pagador para realizar una acción específica en su nombre. Estos honorarios, casi siempre pagados por adelantado, sólo garantizan el compromiso del receptor. Además, los honorarios del anticipo no suelen representar el coste final total de los servicios prestados.
Lo más importante:
- Un anticipo es un pago que el cliente hace a un profesional, a menudo un abogado, por servicios futuros.
- Los honorarios de retención no garantizan un resultado o un producto final.
- Una parte de los honorarios de retención puede devolverse si los servicios acaban costando menos de lo previsto inicialmente.
Cómo entender los honorarios de retención
Los honorarios de retención son un pago por adelantado que realiza un cliente a un profesional, y se consideran un pago inicial de los futuros servicios prestados por ese profesional. Independientemente de la ocupación, los honorarios de retención financian los gastos iniciales de la relación de trabajo. Por esta razón, este tipo de honorarios suele permanecer en una cuenta separada del salario por hora del consultor, autónomo o abogado. Esto garantiza que el dinero no se utilice para fines personales antes de que los servicios se hayan prestado en su totalidad.
La forma más común de honorarios de retención se aplica a los abogados que, en la mayoría de los casos, requieren que los clientes potenciales proporcionen un honorario de retención por adelantado.
Los honorarios de retención no garantizan un resultado o un producto final.
Ejemplo de honorarios de retención
Por ejemplo, un abogado puede cobrar una cuota de retención de 500 dólares. Si el abogado cobra un total de 100 dólares por hora, el bono de retención cubre todos los servicios hasta el límite de cinco horas. El abogado factura entonces al cliente el coste de las horas adicionales que invierte en su nombre.
En este ejemplo, si un caso judicial requiere 10 horas de tiempo del abogado, éste cobra al cliente 500 dólares más, lo que supone 1.000 dólares si se incluye el anticipo. Si el caso del cliente se resuelve antes de alcanzar el límite de cinco horas, el abogado devuelve al cliente la parte restante del anticipo. Si el caso se resuelve en tres horas, por ejemplo, el abogado devolverá 200 dólares al cliente.
Honorarios de retención devengados frente a. Honorarios de retención no devengados
Los honorarios no devengados se refieren al pago inicial de dinero que se mantiene en una cuenta de anticipo antes de que se preste cualquier servicio. Los honorarios de los retenedores se perciben una vez que se han prestado todos los servicios.
En el ejemplo anterior, el anticipo se considera no devengado hasta que se cierre y finalice el caso judicial. Estos honorarios no devengados no pertenecen a la persona que realiza las tareas, en este caso, el abogado hasta que el trabajo comienza realmente. Los honorarios de retención no devengados que no se utilicen pueden ser devueltos al cliente.
Los honorarios devengados, en cambio, se refieren a la parte del anticipo que el abogado tiene derecho a percibir una vez iniciado el trabajo. Los honorarios de anticipo devengados pueden concederse al abogado poco a poco, en función del número de horas trabajadas. La distribución de los honorarios de retención también puede basarse en tareas o hitos. Por ejemplo, un abogado puede recibir el 25% de los honorarios del anticipo después de completar el proceso previo al juicio.