Las comisiones son un mal inevitable de la inversión, pero eso no significa que tenga que pagar de más cuando se trata de ellas. Pocas personas prestan atención a los gastos de sus inversiones cuando los tiempos son buenos, pero lo que no saben es que esas pequeñas y molestas comisiones pueden mermar sus rendimientos.
Tomemos como ejemplo una cartera de inversión de 100.000 dólares. Si paga 0.Con un 50% de comisiones anuales durante veinte años, esas comisiones reducirán el valor de su cartera en 10.000 dólares. Si las comisiones son del 1%, esa reducción se eleva a cerca de 30.000 dólares en el mismo periodo. Para los inversores que quieran optimizar su cartera y reducir las comisiones de inversión, hay algunas formas sencillas de hacerlo. Pero antes de empezar a buscar formas de reducir las comisiones de inversión que paga, tiene que entender primero cuáles son.
La normativa exige que las comisiones de inversión se den a conocer de forma más destacada, pero sigue siendo muy confuso para los inversores que no tienen tiempo de examinar un largo folleto para averiguarlo. De hecho, según una encuesta realizada por AARP en 2011 entre los participantes del plan 401(K), un enorme 71% ni siquiera sabía que estaba pagando comisiones.
Una de las comisiones más conocidas es el coeficiente de gastos o la cantidad que se destina a los gastos administrativos, de gestión, de publicidad y otros gastos administrativos. Si el fondo tiene un ratio de gastos del 1%, eso significa que el 1% de sus activos invertibles se destinará a cubrir los gastos de funcionamiento del fondo. El ratio de gastos va a variar dependiendo de su inversión. Otra comisión importante que puede sufrir un inversor es la que se cobra si el fondo utiliza una empresa de corretaje para promocionar su producto.
Las comisiones no pueden evitarse por completo, pero pueden reducirse. Desde la búsqueda de fondos de bajo coste hasta la adopción de un enfoque más pasivo, a continuación se describen cuatro formas de reducir los costes generales de la inversión.
Consiga un poco de pasividad en su cartera
En el caso de las cuentas gestionadas activamente, ya sea un fondo de inversión o una cuenta de corretaje, los inversores suelen pagar más comisiones que en las inversiones pasivas o que no tienen una persona que las gestione activamente. Según Morningstar, los inversores pagan una media de 1.Un 2% de comisiones en los fondos de gestión activa, mientras que el fondo medio negociado electrónicamente (ETF) cobra un 0.44%. Una forma fácil de reducir la cantidad que paga en comisiones es pasarse a un fondo de bajo coste, como un fondo indexado que siga un índice específico o un ETF. Incluso un fondo de bonos puede ser más barato que uno de gestión activa.
Si le gusta la idea de tener un gestor de carteras que gestione sus inversiones, busque uno que no le cobre muchas comisiones. Apuesta segura: opte por un fondo de gestión activa que mantenga el ratio de gastos en un 1% o menos.
Opte por un fondo sin carga
No todos los fondos de inversión son iguales, ni tampoco las comisiones asociadas a ellos. Las empresas de fondos de inversión no son organizaciones sin ánimo de lucro, lo que significa que quieren ganar dinero. La pregunta que deben hacerse los inversores es cuánto.
Para mantener el coste de un fondo de inversión bajo, los inversores deberían intentar evitar cualquier fondo que tenga una carga asociada. Eso significa que el fondo está pagando una comisión a quien vende su fondo por ellos.
Si el fondo de inversión tiene una carga inicial, significa que se le cobra la comisión por adelantado. Si se trata de un fondo cargado por la parte posterior, se le aplica cuando vende el fondo de inversión en un número determinado de años. La comisión es más alta el primer año y disminuye anualmente hasta que finaliza el periodo de tenencia. Esa carga o comisión puede ser de hasta el 5% de los activos invertidos y es algo que se puede evitar eligiendo un fondo de inversión sin carga, que no tiene comisión alguna. Una forma rápida de saber si el fondo tiene una comisión asociada es si figura como clase A, B o C.
Elija un corredor con descuento para ahorrar en comisiones
Los inversores a los que les gusta hacerse cargo de su cartera eligiendo sus acciones pueden tener fácilmente problemas de comisiones si utilizan una empresa de corretaje que cobra mucho por operación. Puede que le guste la investigación, las herramientas y otros servicios asociados a la empresa de intermediación, pero si está pagando 19 dólares.95 por operación frente a 4 dólares.95, esto puede mermar sus beneficios en gran medida.
No quiere renunciar a esa empresa de corretaje tan cara? Otra forma de reducir las comisiones es controlar la cantidad de operaciones que se realizan. Los gastos de transacción pueden acumularse, y mantenerlos controlados puede ahorrarle dinero. Por no mencionar que esto le obligará a ser un inversor de tipo „comprar y mantener”, lo que podría recompensarle en forma de mayores rendimientos a largo plazo.
Cuidado con esas pequeñas comisiones
En este mundo tan acelerado en el que vivimos, es comprensible que la gente no tenga tiempo de revisar sus cuentas de inversión para identificar las comisiones que están pagando, pero tomarse el tiempo extra puede ser financieramente gratificante. Tomemos como ejemplo la comisión anual. Algunas empresas de corretaje le cobrarán una comisión anual si no opera o si no mantiene una cantidad específica en su cuenta. Conocer esa norma de antemano puede ayudarle a evitar la comisión o a ir a otra empresa que no la tenga o que esté dispuesta a renunciar a ella.
El resultado final
Las comisiones de inversión son una parte inevitable de la inversión, pero no tienen por qué ser tan grandes como para mermar su rentabilidad. Al fin y al cabo, nadie quiere ver desaparecer miles de dólares de ganancias por culpa de las comisiones. Elegir fondos de inversión de bajo coste, optar por inversiones pasivas, como un ETF o un fondo indexado, y ser consciente de lo que se paga en comisiones puede contribuir en gran medida a reducir la cantidad que se paga por invertir.
Fuentes del artículo
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